El vicegobernador de Nueva York desafiará a Kathy Hochul en las primarias demócratas de 2026: "El estado merece un mejor liderazgo"

Antonio Delgado anunció su candidatura a gobernador de Nueva York para 2026. El vicegobernador demócrata lanzó así un desafío directo contra la actual gobernadora de su partido, Kathy Hochul, quien espera poder obtener un segundo mandato. Delgado, actualmente de 48 años, aseguró que el estado necesita un "mejor liderazgo" a futuro. 

“Escuchen, los poderosos y bien conectados tienen sus defensores. Me postulo para gobernador para ser el suyo”, aseguró Delgado en su primer anuncio de campaña, el cual fue publicado en la tarde del lunes. A su vez, prometió impulsar una "visión audaz y transformadora" para los neoyorquinos. 

A su vez, el anuncio habla de “atención médica universal” y “prejardín infantil universal”, como así también de hacerle frente a "los ataques de la administración Trump”.  "Es importante que creamos que la democracia puede funcionar para el pueblo. Hay una razón por la que estamos en el centro del ataque de la administración Trump. Representamos todo lo que quieren derribar. Pero no dejemos de averiguar por qué luchamos. Creemos en los hechos, la verdad, la libertad, el Estado de derecho y la justicia para todos", agregó. 

"La gente está sufriendo y Nueva York merece un mejor liderazgo. Hay una ausencia de liderazgo audaz, decisivo y transformador”, le dijo el vicegobernador a The New York Times.

Delgado fue nombrado en su actual puesto por la propia Hochul, quien tomó esa decisión en abril de 2022, luego de que el titular Brian Benjamin fuera arrestado por corrupción. Se convirtió así en el primer político con raíces hispanas en ocupar un cargo estatal en Nueva York. En aquel momento, la gobernadora describió al hoy candidato como "una estrella emergente con un currículum a la altura".

En julio del 2024, Hochul anunció que se postularía en 2026 con Delgado nuevamente como compañero de fórmula. El anuncio del vicegobernador no solo cambia esos planes, sino que trae consigo la posibilidad de una primera muy competitiva y muy costosa. 

Si bien las encuestas por ahora le sonríen a la gobernadora en las primarias, la mayoría de los votantes preferiría a otra persona en la mansión del gobernador. De acuerdo con Siena College, el 55% de los neoyorquinos optarían por "un candidato diferente".