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ANÁLISIS

¿Será el 'Gran, Maravilloso' proyecto de ley el golpe de gracia para Planned Parenthood?

Pánico en el gigante abortista y entre los demócratas al contemplar el megaproyecto aprobado por la Cámara la desfinanciación de la compañía, que depende en más de un 40% de los fondos federales y que este año batió su récord de abortos.

Manifestantes provida piden desfinanciar a Planned Parenthood frente al Supremo

Manifestantes provida piden desfinanciar a Planned Parenthood frente al SupremoAFP

Israel Duro
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En menos de un mes Planned Parenhood ha pasado de presumir de haber establecido un nuevo récord de abortos en un año a temer por su supervivencia tras la aprobación por la Cámara de Representantes del Gran, Maravilloso proyecto de ley de Donald Trump, que contempla su desfinanciación.

Un mazazo mortal que la propia compañía reconoció, aunque optó por el victimismo y por acusar a los republicanos de dejar sin cobertura sanitaria a millones de personas. Un punto que cada vez es menos cierto puesto que los propios informes anuales de Planned Parenthood indican un número cada vez menor de pacientes en cuestiones puramente sanitarias en detrimento de un aumento de abortos y tratamientos trans incluso a menores. 

AOC, ejemplo de la desolación demócrata

También rechinaron los dientes los demócratas más radicales tras ver en primera fila como ni siquiera los legisladores republicanos rebeldes eran capaces de hacer descarrilar el proyecto de ley impulsado por el propio Trump personalmente. 

Por ejemplo, la representante Alexandria Ocasio-Cortez cargó duramente contra este movimiento durante la sesión de votación en el pleno, esgrimiendo las consignas clásicas de los abortistas en estos casos, sin preocuparse de que sus quejas por el fin de pruebas prenatales, screening o similares en realidad ya están produciendo por decisión de la propia compañía, que prioriza los abortos y los tratamientos trans.

Los provida celebran la aprobación de la norma en la Cámara

Por el contrario, los movimientos provida aplaudieron la medida, que calificaron de "victoria monumental". Según el último informe de resultados de la propia compañía, Planned Parenthood recibe más del 40% de sus ingresos del Gobierno federal a través de subvenciones, contratos y reembolsos de Medicaid. 

Es decir, la multinacional del aborto se embolsa unos 2 millones de dólares al día salidos directamente del bolsillo de los contribuyentes. Además, la financiación de la organización por con fondos federales ha seguido una trayectoria ascendente durante los últimos doce años, con un aumento del 50% desde 2013", apunta LiveNews.

La otra gran línea de negocio por la que estaba apostando Planned Parenthood tampoco recibirá fondos públicos si la norma llega como está redactada ahora mismo a la mesa del presidente. Y es que la la multinacional abortista se volcó en los tratamientos trans, a los que Trump cortó el grifo de dinero desde el minuto cero de este segundo mandato, un movimiento que esta norma termina de certificar.

"Trump y Johnson cumplieron por la familia estadounidense"

La norma también fue aplaudida por Terry Schilling, presidente del American Principles Project,, que apuntó que, además de la lucha en defensa del no nacido y contra las tratamientos trans, el peoyecto de ley recoge también ventajas para las familias: 

"El presidente Trump y [el presidente de la Cámara de Representantes Mike] Johnson cumplieron por la familia estadounidense. El proyecto de ley One Big, Beautiful Bill que aprobó la Cámara pondrá fin a la financiación de los contribuyentes para las cirugías de transición de género, desfinanciará Planned Parenthood y aumentará el Crédito Tributario por Hijos: todas son victorias monumentales para nuestra gran nación. Ahora es el momento de que el Senado lleve este proyecto de ley a la línea de meta, para que podamos Hacer a las Familias Grandes de Nuevo".

Comienza la batalla para que el Gran, Maravilloso proyecto de ley supere el Senado

Conocidas activistas como Riley Gaines, comenzaron la campaña para asegurarse de que el Senado saque adelante la aprobación del megaproyecto de Ley de Trump tal y como está redactado en lo relativo a Planned Parenthood y las familias. Los republicanos no cuentan con los 60 escaños necesarios en la Cámara Alta para superar el filibustero, y alguno de sus miembros ya han anunciado un "no" rotundo al texto actual, por lo que se prevé una árdua batalla por sacarlo adelante, en especial para que Trump pueda tenerlo sobre su mesa antes del 4 de julio.
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