Noem exige pena de muerte para los responsables del naufragio mortal vinculado al tráfico de personas

La secretaria del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), Kristi Noem, pidió este miércoles que se imponga la pena de muerte a dos ciudadanos mexicanos acusados de tráfico de personas, tras un naufragio ocurrido frente a las costas de San Diego. El incidente, que tuvo lugar el 5 de mayo, dejó tres migrantes muertos y al menos siete desaparecidos, entre ellos una niña. Según las autoridades, los detenidos habrían intentado introducir ilegalmente a un grupo de personas por mar, lo que reavivó las alertas sobre los riesgos extremos que implica el contrabando marítimo hacia Estados Unidos.

“Solicitaré formalmente al fiscal general que garantice que estos dos presuntos contrabandistas sean procesados con celeridad y con todo el rigor de la ley”, afirmó Noem en una declaración oficial. “[Las] muertes no solo eran evitables, sino que también fueron resultado directo de la codicia y la indiferencia de los contrabandistas que los explotaron”.

Una tragedia evitable

La embarcación, una panga de origen mexicano, transportaba al menos a 16 personas —14 adultos y dos menores— cuando volcó cerca de la costa sur de California. Tres cuerpos fueron recuperados, identificados como ciudadanos de la India. Una de las víctimas era un niño de 14 años; su hermana de 10 años sigue desaparecida y se presume muerta. Sus padres, también originarios de la India, fueron hospitalizados tras ser rescatados.

Los detenidos —Julio César Zúñiga Luna, de 30 años, y Jesús Juan Rodríguez Leya, de 36— enfrentan cargos por tráfico de personas con resultado de muerte. Otros tres individuos también han sido arrestados en conexión con el caso.

“El contrabando marítimo no solo es ilegal, sino un delito violento e inherentemente peligroso”, subrayó Noem, quien prometió que el DHS seguirá trabajando con otras agencias federales para llevar a los responsables ante la justicia.

Investigación en curso y nuevos arrestos

Horas después del accidente, agentes fronterizos rastrearon un vehículo visto en la escena del naufragio. Aunque el conductor logró escapar, se identificaron y detuvieron otros dos vehículos presuntamente implicados. Ocho de los nueve migrantes inicialmente desaparecidos fueron localizados, con excepción de la niña de 10 años.

Las autoridades continúan investigando lo que consideran parte de una red de tráfico humano que opera en la región sur de California.